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¿Cuáles son las partes de una fresadora industrial?

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Una fresadora industrial es una máquina especialmente indicada para mecanizar diversos materiales. En ella se suelen emplear, sobre todo, metales, todo tipo de aleaciones y madera. La herramienta de corte, también llamada fresa, el motor y la mesa horizontal sobre la que se coloca la pieza a mecanizar son las partes de una fresadora más importantes.

La fresa adquiere una velocidad de corte al girar, lo que le permitirá mecanizar las piezas. El sistema de mecanizado está automatizado. De esta forma, el operario podrá introducir en la máquina las coordenadas precisas para realizar el trabajo en cuestión sobre la pieza. Las operaciones de fresado pueden consistir en el desbaste, la perforación o el corte de dicha pieza.

Las partes de una fresadora industrial

Los diferentes tipos de fresadoras que existen en el mercado disponen de una serie de partes fundamentales.

La mesa de trabajo

La mesa de trabajo es el soporte que sirve de base para colocar la pieza que se desea mecanizar. Esta mesa incorpora una mordaza o una brida con la que el operario puede sujetar la pieza para que no se mueva ni se deslice durante el proceso de mecanizado. Generalmente, las mesas de trabajo que incorporan las fresadoras industriales se ajustan al tamaño de la pieza que se puede mecanizar. La mesa de trabajo se apoya en un soporte rectangular que recibe el nombre de carro transversal.

El motor

Al igual que sucede con cualquier otra máquina o herramienta, el motor es el elemento indispensable para el funcionamiento de la fresadora. Una vez que se acciona el motor, la fresa comienza a girar adquiriendo su velocidad de corte y trabajando en un movimiento de eje horizontal vertical o transversal. La potencia del motor dependerá del modelo de fresadora, pero lo más habitual es que pueda trabajar incluso a más de 4.000 revoluciones por minuto.

Las manivelas

Una vez que se coloca la pieza sobre la mesa de trabajo, hay que bajar la fresa para iniciar el corte. Para poder bajarla, se emplean las manivelas. Esta es una de las partes de una fresadora que puede variar en función del modelo. De hecho, hay 4 tipos de manivelas diferentes: vertical, longitudinal, transversal y de cabezal. El nombre de cada una de ellas indica el movimiento con el que se desplazará la mesa de trabajo para el mecanizado de la pieza.

El cabezal

La fresa o herramienta de corte se sitúa en el cabezal. Este dispositivo posibilita que el operario pueda colocar la fresa en diferentes posiciones para ejecutar cualquier trabajo. De hecho, el cabezal es la parte que hace que la herramienta de corte adquiera el ángulo necesario para impactar contra la pieza. Hay fresadoras más modernas que permiten la sustitución de la fresa por otro elemento de corte o perforación. Así, una misma herramienta puede ejecutar diferentes trabajos.

El husillo

Si bien la fresa se coloca en el cabezal, esta herramienta de corte se halla introducida en el husillo. Es esta parte de la fresadora la que, en realidad, recibe el movimiento impulsado por el motor para moverse. Gracias al husillo, la fresa empieza a girar a gran velocidad para realizar el corte o el mecanizado sobre la pieza. La mayoría de fresadoras incorporan una caja de velocidades para controlar la velocidad del husillo. Serán las manivelas las que nos permitan bajar el husillo con la fresa para trabajar.

También puede darse el caso de que, en función del tipo de fresadora, el husillo pueda ser diferente. La fresadora vertical, por ejemplo, dispone de un husillo vertical, mientras que la fresadora horizontal recibe este nombre por contar con el husillo en dicha posición.

El funcionamiento de una fresadora industrial

Una vez que conocemos las partes de una fresadora, es necesario hablar del funcionamiento de esta máquina.

Una vez que se acciona el motor de la máquina, la fresa o herramienta de corte comienza a girar a gran velocidad. El operario, de forma manual o automatizada, será el encargado de bajar la fresa hasta la pieza con las manivelas para arrancar la viruta, desbastar, perforar o cortar el material.

El control numérico (CNC) con el que trabajan las fresadoras industriales actuales permite que todo el trabajo esté ya automatizado. Antes de arrancar el motor, el operario introducirá en la máquina las coordenadas y tareas a seguir para mecanizar la pieza. A continuación, la máquina se encargará del mecanizado sin que el operario tenga que actuar. Esto posibilita un menor esfuerzo, una mayor seguridad y un nivel de precisión mucho más elevado.

Todas las anteriores son las partes más importantes de una fresadora más importantes, elementos fundamentales para el funcionamiento de esta máquina que puede tener de 3 a 6 ejes y que dispone de un cabezal fijo que incorpora las correspondientes herramientas de corte.