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¿Cómo funciona el taladro en torno?

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El taladro en torno hace referencia a un tipo de mecanizado por arranque de viruta en el que el movimiento de corte es circular y que se caracteriza porque la herramienta solo puede realizar un movimiento de avance según la dirección del eje de giro. Este mecanizado se lleva a cabo en ciertos tipos de tornos.

¿Qué es el taladrado en el torno?

El taladrado es un tipo de mecanizado muy habitual en la metalmecánica que consiste en cortar o perforar una pieza haciendo girar una herramienta de corte llamada broca. En el taladrado, el mecanizado se realiza por arranque de virutas, haciendo un orificio con bordes perfectamente delimitados. El orificio puede abrirse según las necesidades de la pieza, modificando su forma y diámetro.

Es posible efectuar el mecanizado por taladrado con un taladro manual (cuando son piezas de poca complejidad o trabajos puntuales), pero requiere gran precisión y destreza por parte del operario; este mecanizado también puede ejecutarse utilizando alguno de los muchos tipos de taladradoras que existen. Además de estas dos máquinas herramientas, algunos modelos de tornos están equipados con la función de taladrado, pues el taladrado en sí mismo es una operación de torneado junto con el cilindrado, refrentado, ranurado, roscado, etcétera.

El taladro en torno se efectúa cuando la pieza se tiene que colocar en una posición exacta del eje del taladro o cuando, sobre una misma pieza, se necesitan hacer varios procesos de mecanizado. Por comodidad, la pieza se trabaja en una única máquina herramienta capaz de realizar todos los procesos necesarios. 

Ventajas del taladro en torno

Realizar este tipo de mecanizado en el torno aporta una serie de ventajas para los talleres. Por una parte, los resultados del taladrado en esta máquina herramienta son de gran calidad, con excelentes acabados y muy precisos. Además, permite la reducción de tiempos y costes de producción, puesto que si el torno funciona utilizando la tecnología CNC o control numérico computarizado, una pieza pequeña puede estar terminada en cuestión de minutos, ya que estas máquinas están diseñadas para la producción en serie.

Por otra parte también se reduce la mano de obra, ya que los operarios solo tendrán que colocar la pieza en el plato de la máquina e indicarle al ordenador del equipo el trabajo que se desea ejecutar. Gracias a que los tornos CNC son máquinas automatizadas, no es necesario que la pieza se cambie de posición o ángulo, pues el torno cuenta con las herramientas necesarias para colocar la pieza según las necesidades de mecanizado. 

Por ejemplo, si se quiere mecanizar una pieza de diseño complejo, que deba pasar por varios procesos como cilindrado, fresado y taladrado, sin un torno CNC o un torno multifunción, la pieza tendría que colocarse en tres máquinas diferentes y ser sometida a tres procedimientos distintos. En un torno CNC, en cambio, se pueden practicar todos los procesos, ahorrando tiempo y, por supuesto, mano de obra. Es por esta razón que este tipo de máquinas se utilizan en múltiples industrias que van desde la metalmecánica hasta la elaboración de piezas artísticas. 

El único inconveniente de realizar el taladro en torno es que se requiere un operario experto en el diseño de las piezas. Esto se debe a que, para potenciar al máximo el funcionamiento de la máquina y poder realizar los diferentes procesos de mecanizado, es  necesario hacer una correcta programación utilizando los programas CAD y CAM, así como la adecuada traducción al lenguaje alfanumérico CNC. De lo contrario, ni los tiempos ni los costes de producción se reducirían.

Requisitos para taladrar correctamente

Los tornos que permiten el mecanizado por taladrado deben contar con las herramientas necesarias para esta función. El torno multifunción, por ejemplo, está equipado con dos husillos que alternan las herramientas necesarias de forma automática, pero es indispensable que las herramientas sean las más adecuadas. En el caso del taladrado, se necesita una broca. El tipo de broca varía en función de la pieza a mecanizar; aquí se debe considerar el diseño, el tipo de taladrado (superficial o profundo); el diámetro de los agujeros, el ángulo, etcétera. 

Las brocas son herramientas de corte y tienen forma cilíndrica con ranuras helicoidales o rectas, terminadas en una punta cónica y están afiladas siguiendo un ángulo muy específico. Estas herramientas se caracterizan por su diámetro, forma y materiales con los que han sido fabricadas. 

Es muy importante elegir la broca adecuada para obtener buenos resultados. Así, por ejemplo, existen brocas fabricadas en acero al carbono y acero rápido; las primeras son poco utilizadas en la industria debido a su alto coste, mientras que las brocas de acero rápido son más comunes por su resistencia al desgaste y al calor, así como por su uso en el mecanizado a gran velocidad de corte.

Por último, para obtener buenos resultados de taladrado en torno, es importante saber utilizar la máquina y hacerlo siguiendo las recomendaciones del fabricante. Esto se debe a que durante el proceso se producen grandes cantidades de virutas o desechos, por lo que es aconsejable utilizar la máquina con precisión y hacer el mantenimiento adecuado para evitar paradas inesperadas en la producción.f